Golden Goose es la marca italiana que revolucionó el mundo de la moda con sus particulares sneakers con aspecto envejecido y sucio. Sus icónicas zapatillas destrozadas se han convertido en objeto de deseo entre celebridades y fashionistas. Pero, ¿Cómo nació esta controversial firma?
Todo comenzó en 2000 cuando Alessandro Gallo y Francesca Rinaldo, dos emprendedores venecianos, decidieron crear una marca de calzado inspirada en el espíritu vintage americano. Buscaban diseños innovadores con un aire retro.
El nombre Golden Goose (Ganso Dorado en inglés) surgió como un homenaje a la fábula de la Gallina de los Huevos de Oro. Esta leyenda sobre la codicia y la avaricia representaba la esencia detrás de la compañía: crear el zapato perfecto.
Tras varios intentos encontraron la fórmula ganadora: sneakers con cortes distintivos, materiales de primera calidad y un delicado proceso de envejecido artesanal. El resultado eran zapatillas que parecían haber vivido cientos de historias.
Lo que comenzó como un pequeño taller en Venecia se transformó en una empresa con proyección global. En 2007 presentaron por primera vez al mundo sus creaciones envejecidas y con estoperoles, generando opiniones enfrentadas.
Muchos las consideraron zapatillas sucias y de mal gusto. Pero poco a poco se ganaron un lugar en el streetstyle y la moda, convirtiéndose en un éxito entre it girls y celebrities.
Hoy Golden Goose presenta más de 300 modelos de zapatillas, logrando facturaciones multimillonarias. Sus tenis destrozados son el epítome del lujo despreocupado, la mezcla perfecta entre lo clásico y lo moderno. Unas sneakers con actitud que han trascendido como pocas marcas lo han logrado.
